El polen es considerado como un complemento nutritivo que aporta a nuestro
organismo múltiples beneficios.
Aunque la presencia de polen en el ambiente provoca una serie de molestias a
las personas alérgicas, debemos también saber lo que el polen aporta a nuestro
sistema inmunológico fortaleciéndolo a la hora de afrontar los cambios estacionales.
El polen de las flores es transportado por las abejas hasta sus colmenas, y es ahí donde
con sus patas trabajan una mezcla a base de polen, néctar y miel
convirtiéndolos en pequeños granos de polen.
Entre los beneficios del polen tenemos que es depurativo, energizarte, revitalizante y
alto poder antioxidante que nos ayudará a prevenir el cáncer.
Contiene proteínas, vitaminas A,B,C,D, E, K, minerales, sodio, magnesio, calcio, potasio, hierro
cinc, azufre,manganeso, cobre, cloro y enzimas.
Su consumo está aconsejado cuando se presentan estados de convalecencia, cuadros de
estrés, cansancio, debilidad.
Ante la falta de apetito actúa como estimulante, es bueno para la memoria y en los niños-as
les fortalece durante el crecimiento.
Aunque su consumo se remonta a la antigüedad, actualmente es cada vez más conocido y podemos
encontrarlo en los herbolarios, mercados, supermercados…
Sigue las indicaciones que en el envase te indicarán con respecto a las dosis que puedes tomar.
Es aconsejable consumirlo por las mañanas y puedes mezclarlo con zumo de frutas, yogures,leche.
Sobre la autora
Escrito por Tere en Pellizcos de salud